PLAN DE MEJORAMIENTO- Taller para el Grado Sexto- Lengua Castellana y Literatura
- Responde:
1. ¿Qué son las Normas ICONTEC?
2. ¿Para qué se aplican estas normas en los trabajos escritos?
3. En pocas palabras, escribe cómo se debe presentar un trabajo escrito.
4. Haz un ejemplo de portada de un trabajo escrito.
5. Describe muy bien tu casa y subraya los adjetivos que utilices en esta descripción.
6. Niña linda: (Grados de significación)
a. Esa niña es linda
b. Esa niña es TAN linda COMO mi hermana
c. Esa niña es MÁS linda que mi vecina.
d. Esa niña es MENOS linda que tu prima
e. Esa niña es MUY linda
f. Esa niña es LINDÍSIMA.
De acuerdo con el ejemplo anterior, escribe los grados de significación de los siguientes pares de palabras:
- Carro grande
- Señora hermosa
- Camisa costosa
- Niño mentiroso.
- Lee cuidadosamente el siguiente cuento y responde luego las preguntas que se formulan al final del texto
¿ADÓNDE VA MR. SMITH?
Joe Smith se había despertado. Estiró los brazos y las piernas cinco, diez, quince veces experimentando, al hacerlo, una secreta alegría. Después miró su reloj: exactamente las 7:00.
- Qué bonito día - exclamó -. Lástima que no fuera domingo.
Se desnudó rápidamente y se dirigió al baño, cuya puerta permanecía abierta.
- Qué mal color tengo - dijo -, mirándose al espejo y pasándose la mano por el rostro. Joe Smith tenía el pulso muy agitado y había empezado a sudar.
- ¿Serían las copas de anoche? No, Joe; tú no eres de ésos. ¡Vamos, hombre, reacciona! - concluyó por darse ánimo.
Después abrió lentamente la llave del agua y se quedó mirando cómo saltaban las goticas al tocar el suelo. Intentó lavarse primero las piernas, como hacía siempre, pero no pudo. Se vistió de nuevo.
- Bueno, por lo menos me afeitaré - pensó, con idéntico resultado.-
Joe Smith estaba perplejo. Nunca se había sentido tan mal. Hubiera querido acostarse, pero le parecía que con ello no iba a conseguir nada y que, además, si no acudía a trabajar, fácilmente podría perder su empleo, se sentó al borde de la cama, metió ligeramente el cuerpo hacia delante.
Así estaba mejor. ¿Cuánto tiempo permaneció en aquella posición? No lo sabía. De pronto, oyó que alguien lo llamaba:
- Joe, Joe Smith.
Joe miró a su alrededor, pero no vio a nadie.
¡Qué nervioso estoy! - dijo -. Debe ser cosa de la fiebre. Y volvió a quedarse como antes.
De nuevo le pareció escuchar la misma voz, volvió a mirar y encontró el mismo vacío en torno suyo. Ni siquiera el más leve ruido que pudiera denunciar la presencia de alguien. Repitió el experimento varias veces inútilmente.
Comenzaba a inquietarse. Se levantó y se puso a buscar por los rincones. Todo lo miró, todo lo examinó, hasta el interior de los armarios. ¡Nada! Por todas partes la misma soledad. Pero había que probar por última vez para no volverse loco. Y lo hizo. Y volvieron a llamarlo:
- Joe, Joe Smith.
"¿Espíritus? ¿A quién se le ocurriría pensar en ellos? ¡Bah! Mentiras.
Terminó de vestirse y salió a la calle. Tal vez aún alcanzara a llegar a tiempo. Caminaba muy deprisa, tanto como si fuera volando. Las casas se le perdían repentinamente de los ojos y los vehículos marchaban muy lentamente. Pero lo más extraño de todo era que las personas con quienes se encontraba parecían ignorarlo por completo.
Joe penetró en el lugar donde trabajaba, sin que nadie aparentara darse cuenta de ello. Es más: ninguno contestaba a su saludo, a pesar de que Joe alzaba la voz cuanto podía. El gerente, otras veces tan amable, ni siquiera se volvió a mirarlo cuando le dio los buenos días.
Confuso, avergonzado, se dirigió a su puesto. Lo encontró ocupado. Un hombre, como de treinta años, estaba frente a su escritorio. ¿Le habían reemplazado tan pronto? Tal vez esto explicara la indiferencia con que le habían recibido. Estarían disgustados con su conducta. Llegar con tanta demora a un establecimiento de tal importancia como era aquél. ¿Qué se imaginaba?
Naturalmente, convenía alejarse de quien así correspondía al buen trato de la empresa. ¡Pobre Joe! Tenía que buscarse otro trabajo. Era inútil pedir explicaciones. Resultaba demasiado claro para que tuvieran que enrostrárselo en otra forma. La puerta estaba abierta para él. Lo habían despedido.
Salió apresuradamente, sin saber a dónde encaminarse. Anduvo en todas direcciones hasta quedar totalmente agotado. Entonces se acordó que no había comido nada en todo el día y se entró al primer restaurante que halló abierto. Ocupó una mesa desde donde podía ser visto con facilidad, esperando que así no demorarían en atenderlo. Pero nadie demostró haberse dado cuenta de su presencia. Llamó a uno de los sirvientes. Después a otro y a otros. Llamó a todos pero ninguno se acercó a él. Golpeó fuertemente la mesa con los puños. Gritó. Maldijo. Por último, angustiado, sin comprender lo que ocurría, abandonó el recinto, tirando bruscamente la puerta al salir.
En todas partes a donde fue le sucedió lo mismo. Joe creyó que iba a estallar en cólera. Hubiera querido matar a alguien, para calmar sus nervios. "¿Qué le estaba pasando? ¿Todo el mundo se había vuelto loco? ¿O el loco era él? Primero, cuando iba camino de su labor. Después, sus compañeros en la oficina. Y ahora, hasta los empleados de los restaurantes".
Ya estaba oscureciendo cuando llegó a su casa, fatigado, casi muerto de hambre, pensaba que acostándose quizá pudiera recobrar la tranquilidad. Trataría de dormir, para ver si al día siguiente las cosas volvían a normalizarse. Era una pesadilla, no cabía duda. De todos modos, descansando se sentiría mejor.
Antes de entrar en el hogar, le pareció oír que alguien mencionaba su nombre en la casa de al lado. Prestó atención. Efectivamente, un sujeto de mediana estatura estaba preguntando por él, tal vez por haber equivocado su dirección. Claramente oyó cuando la vecina decía:
- ¿Míster Smith? ¿Míster Smith? Sí, vivía allí, pero ahora la casa está deshabitada.
-Eduardo Arango Piñeres (Antología del cuento colombiano)
PREGUNTAS
1. Joe Smith se despertó:
A. El domingo por la mañana
B. El domingo por la noche
C. Un día de trabajo cualquiera
D. Con mucho sueño
2. En el baño, Joe Smith conversa:
A. Consigo mismo
B. Con la esposa
C. Con un hijo
D. Con un vecino.
3. Al escuchar que lo llaman, Joe Smith:
A. Sale despavorido a pedir ayuda.
B. Busca por todos los rincones de la casa.
C. Se trepa en la cama asustado.
D. Se paraliza y no sabe qué hacer.
4. Todo apunta- piensa Joe Smith- que en la casa:
A. Se oye la voz de los vecinos.
B. Entran los ruidos de la calle
C. Se metieron los ladrones.
D. Hay espíritus
5. En la calle, en el trabajo y en el restaurante:
A. Las personas lo saludan.
B. Las personas lo felicitan.
C. Las personas lo ignoran
D. Lo llaman por su nombre
6. Podemos concluir que a Joe Smith no lo tienen en cuenta porque:
A. No lo ven
B. Las personas andan de afán.
C. Lo quieren castigar por levantarse tarde.
D. No tienen tiempo.
7. Joe Smith piensa que lo han despedido pues:
A. Los compañeros están disgustados y no lo saludan
B. El Jefe está molesto por llegar tarde.
C. Hay orden de no saludarlo.
8. El desenlace del cuento me permite deducir que Joe Smith:
A. Vive una horrible pesadilla
B. Siempre sueña despierto.
C. Las copas de la noche anterior le cayeron mal.
D. Hace bastante que falleció
9. Una de las opciones de es AGUDA-ESDRÚJULA-GRAVE:
A. Reloj- Barómetro- Árbol
B. Jabón- Óscar- Médico
C. Termómetro- Madrid- Ojos
D. Césped- Velo- Hipódromo
10. El ordinal 114º se escribe así:
A. Centésimo décimo cuarto
B. Centésimo décimo cuatro
C. Centésimo cuarto
D. Centésimo catorce
| | 1 | 2 | 3 | 4 | 5 | 6 | 7 | 8 | 9 | 10 |
| A | O | O | O | O | O | O | O | O | O | O |
| B | O | O | O | O | O | O | O | O | O | O |
| C | O | O | O | O | O | O | O | O | O | O |
| D | O | O | O | O | O | O | O | O | O | O |
11. Completa las siguientes afirmaciones, relativas a las partes del cuento:
a- El INICIO va desde que Joe Smith se despierta hasta…
b- El NUDO va desde __________ hasta…
c- El DESENLACE va desde __________ hasta…
NOTA: El estudiante que así lo deseé, puede enviarme las respuestas como ARCHIVO ADJUNTO a mi correo inocencio14@gmail.com
